El Futuro y el Presente de los Seguros

La industria del seguro se enfrenta al desafío de la transformación digital. No es un tema menor, más si se considera que se trata de un segmento históricamente cauteloso, que enfrenta regulaciones muy estrictas y con compañías de gran tamaño. Los cambios vertiginosos no suelen ser su fuerte. Sin embargo, la velocidad a la que se dan las modificaciones en el negocio impide que las organizaciones del sector puedan mostrarse indiferentes.

La consultora Gartner, especializada en temas de tecnología, puso el foco en cómo la industria del seguro puede aprovechar las nuevas herramientas y recursos para lograr no sólo mayor agilidad y flexibilidad, sino también previsibilidad sobre un sector marcado por la incertidumbre y en el que los datos son el corazón del negocio y la fuente para la toma de decisiones a la hora de fijar las primas. Así, las tecnologías predictivas, Internet de las cosas, big data y la información en tiempo real, comienzan a jugar un rol clave para la industria y abren la puerta a nuevos competidores. Todos estos jugadores tienen la capacidad de capturar y estudiar datos estructurados y no estructurados provenientes de sus propios sistemas o de las redes sociales y preparar un producto pensado a la medida del cliente.

Un gran operador, por ejemplo, podría duplicar las ganancias en cinco años al digitalizar los negocios existentes, según un análisis reciente de la consultora McKinsey sobre la digitalización en la industria del seguro. El informe también señala que la automatización de los procesos puede reducir el costo de circuito de reclamos hasta un 30%, un porcentaje importante, en especial en mercados fuertemente regulados y con escasos márgenes. En este sentido, Javier Colomb, Gerente de Ventas para la industria financiera de SAP Argentina señala que “las aseguradoras podrán trabajar más proactivamente en evitar riesgos que en tener que reducirlos”.

Puntualmente en el caso de internet de las cosas, los sensores, que cada vez son más frecuentes en el hogar, el lugar de trabajo, los vehículos y cualquier otro espacio, proveen información que permitirá a las aseguradoras comprender mejor a sus clientes, las situaciones o el medio ambiente. Un ejemplo claro se da con los seguros de automóviles: si se colocara a cada vehículo un dispositivo, la empresa sabría en tiempo real cómo conduce su asegurado, si viola las normas de tránsito, si frena de golpe muy seguido, si gira a gran velocidad en las esquinas… Los elementos subjetivos de la relación aseguradora-cliente desaparecerían y se podría premiar a quienes mejor manejan con importes mensuales más bajos.

Fuente original:

https://news.sap.com/latinamerica/2017/11/01/el-futuro-de-la-industria-del-seguro/